El azúcar y los refrescos

Aprendamos a tomar conciencia del azúcar refinado o los edulcorantes que tomamos en las bebidas y que dejamos que tomen nuestros hijos. Todo ello desencadena: obesidad, diabetes, hiperactividad,... y numerosos problemas para la salud. Aprende a beber sano: nuestro organismo necesita de un litro y medio a dos de agua pura para funcionar bien diariamente. De esta manera contribuimos a que nuestros riñones trabajen, desechen todo lo que no necesita nuestro organismo y purifica la sangre.  
Además del agua y en lugar de los zumos enlatados o en brik acostúmbrate a tomar zumos naturales que tú mismo puedes hacer en casa, como una simple limonada que ayuda a la absorción de las grasas. Si no te gusta su sabor tan cítrico prueba a endulzarla con estevia, sirope de ágave, miel de caña,... verás qué rica y saludable está.