-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
El bagel es un bollo de pan con forma de rosca gordita, de miga consistente y corteza de color dorada fina y ligeramente crujiente. Tiene de particular que hay que cocerlo en agua antes de meter en el horno. Esto hace que el gluten de la masa se gelatinice, sellado la superficie, reteniendo así todo el aroma y sabor en su interior.
Se suele cubrir con semillas de amapola, sésamo, ajo y cebollas secas, sal gruesa… o todo a la vez.
Luego, se toman con los rellenos que más nos gusten, tanto dulces como salados, como mermelada, margarina, ensalada, verduras, salsas variadas…
Se suele cubrir con semillas de amapola, sésamo, ajo y cebollas secas, sal gruesa… o todo a la vez.
Luego, se toman con los rellenos que más nos gusten, tanto dulces como salados, como mermelada, margarina, ensalada, verduras, salsas variadas…
Ingredientes
150 ml de agua
350 gr. de harina
2 cucharadas de levadura en polvo
1 cucharada de aceite
1 cucharadita de azúcar
1 cucharadita de sal
150 ml de agua
350 gr. de harina
2 cucharadas de levadura en polvo
1 cucharada de aceite
1 cucharadita de azúcar
1 cucharadita de sal
Elaboración
En un bol, con el agua tibia, añade el aceite y la harina mezclada con la levadura, el azúcar y la sal. Mezcla hasta que se liguen los ingredientes, ayudándote de una cuchara de madera mejor. Espolvorea un poco de harina sobre la superficie de la mesa y amasa la mezcla unos 3 minutos. Vuelve a meter en el bol, ahora con las paredes ligeramente aceitadas, tapa con un plástico o paño de cocina, y deja que leve media hora aproximadamente.
Pasado ese tiempo, vuelve a amasarlo sobre una superficie enharinada, para quitarle el aire del levado. Divide la masa en pedazos, y da forma de rosquilla a cada uno. Deja reposar, tapados, unos 15 minutos más.
Pon a hervir una olla o sartén con agua, hasta que se formen ondas de agua en la superficie, y cuécelos por cada lado un minuto. Verás como aumenta su tamaño al hidratarse. Escurre y coloca en la bandeja del horno, bien aceitada o bien con un papel de hornear. Ahora es el momento de añadir algo encima, si quieres, como semillas de sésamo y de amapola.
En el horno precalentado, cuécelos a media altura a 200ºC unos 15-20 minutos.
Una vez dorados, sácalos y deja que enfríen un poco antes de abrir a la mitad y rellenarlos.
En un bol, con el agua tibia, añade el aceite y la harina mezclada con la levadura, el azúcar y la sal. Mezcla hasta que se liguen los ingredientes, ayudándote de una cuchara de madera mejor. Espolvorea un poco de harina sobre la superficie de la mesa y amasa la mezcla unos 3 minutos. Vuelve a meter en el bol, ahora con las paredes ligeramente aceitadas, tapa con un plástico o paño de cocina, y deja que leve media hora aproximadamente.
Pasado ese tiempo, vuelve a amasarlo sobre una superficie enharinada, para quitarle el aire del levado. Divide la masa en pedazos, y da forma de rosquilla a cada uno. Deja reposar, tapados, unos 15 minutos más.
Pon a hervir una olla o sartén con agua, hasta que se formen ondas de agua en la superficie, y cuécelos por cada lado un minuto. Verás como aumenta su tamaño al hidratarse. Escurre y coloca en la bandeja del horno, bien aceitada o bien con un papel de hornear. Ahora es el momento de añadir algo encima, si quieres, como semillas de sésamo y de amapola.
En el horno precalentado, cuécelos a media altura a 200ºC unos 15-20 minutos.
Una vez dorados, sácalos y deja que enfríen un poco antes de abrir a la mitad y rellenarlos.
Variante
Si tienes algún tipo de leche vegetal, puedes sustituir la mitad de la cantidad del agua de la masa por esta leche.
Si tienes algún tipo de leche vegetal, puedes sustituir la mitad de la cantidad del agua de la masa por esta leche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario