lunes, 3 de septiembre de 2012

Ayuno con sirope de savia y zumo de limón

Ahora que termina el período vacacional y que muchos habrán hecho excesos en las comidas y bebidas típicas de verano, les proponemos un ayuno ideal para desintoxicar el organismo y reforzarlo para el periodo otoñal e invernal. 
Para cualquier persona sana, la "Cura de Savia y zumo de limón" es un medio razonable y natural de liberar el cuerpo de toxinas y depósitos grasos, con lo cual se conserva e incluso mejora el bienestar general y la plena capacidad de rendimiento. 
Mientras se lleva a cabo la cura no puede sobrevenir ningún daño a la salud: el cuerpo recibe todos los nutrientes necesarios y se refuerza el metabolismo. 
En respuesta a quienes han afirmado que no constituye una alimentación equilibrada, hay que aclarar lo siguiente: esta cura no es una forma de alimentación, sino una cura de ayuno que se lleva a cabo por un tiempo limitado (7 o 10 días). Se trata de ayudar al cuerpo a purificarse y liberarse de todos los depósitos tóxicos acumulados y grasas superfluas. Cuando el cuerpo no los elimina espontáneamente, conviene ayudarlo a hacerlo por medio de una cura depurativa.  


El Sirope de Savia ofrece todas las ventajas de un ayuno terapéutico a la vez que aporta vitaminas y minerales para asegurar el buen funcionamiento del organismo durante la cura. 
La cura auténtica 
Está basada en la milenaria terapia del ayuno. Hay que dejar de entrada bien claro que ayunar no significa "pasar hambre", sino vivir por un tiempo determinado de las propias reservas, ingiriendo únicamente agua, zumos o caldos. Además, mientras se realiza el ayuno, el cuerpo aprovecha para deshacerse de los detritus acumulados y permite a los órganos regenerarse y reactivar su funcionamiento. 
¿Cómo funciona? 
En los primeros días del ayuno con sirope de savia, el cuerpo consume el azúcar (glucosa) que fluye en la sangre y que está almacenado en el hígado y los músculos en forma de glucógeno. Posteriormente se sustenta de transformar primero las reservas grasas y finalmente las proteínas. Únicamente cuando las reservas se agotan, el cuerpo comenzaría a digerir las partes y órganos más vitales, lo cual en una persona con una constitución media no aparecería antes de pasar cinco o seis semanas de ayuno. 
Durante la cura, a partir de aproximadamente el tercer día, entra en acción el fenómeno de la autolisis, o autodigestión de células envejecidas, malformadas o inactivas. Es un fenómeno que el cuerpo controla perfectamente y mediante el cual las sustancias inútiles, depósitos tóxicos y grasas superfluas son digeridos y eliminados. Se trata de un trabajo de renovación en profundidad que revitaliza el organismo y eleva el nivel energético de la persona. 
La cura de 7 a 10 días es una buena manera de dar vacaciones a todos los órganos digestivos y canalizar la energía hacia las zonas donde la desintoxicación y curación son más necesarias. Este descanso fisiológico, como el descanso en general, es quizá una de las fuerzas más curativas de la naturaleza. Durante las abstinencia de alimentos, el cuerpo no gasta energía en la digestión y asimilación de nutrientes, descansa, y la energía ahorrada la invierte para autocurarse.  


El cuerpo sólo pierde lo que no es útil: grasas superfluas, incluido el colesterol, y sustancias tóxicas y de desecho acumuladas. 
Jamás aparecen enfermedades carenciales, lo que demuestra que las reservas del organismo se encuentran bien equilibradas. Por el contrario, se ha demostrado que el ayuno mejora los estados de raquitismo y el metabolismo del calcio. En la anemia, el número de glóbulos rojos aumenta durante la cura. 
La realización de la cura debe ser el inicio de unas pautas de vida más sanas que mantenga los efectos beneficiosos del ayuno. 
Fases de la cura 
Los primeros días se caracterizan por una considerable pérdida de peso y una importante desintoxicación celular. Desde el interior de las células, las sustancias tóxicas pasan a la sangre venosa y por las venas llegan a los órganos de eliminación. Esta fuerte eliminación de toxinas al principio de la cura se puede manifestar por malestar, dolores diversos, especialmente articulares, debilidad, boca pastosa y en ocasiones hasta vómitos; todos estos síntomas indican que el cuerpo está en proceso de limpieza y puesta a punto. Muestran la capacidad de respuesta del organismo a la hora de eliminar las sustancias de desecho y tóxicos ingeridos durante años. Para eliminar los tóxicos antes hay que removerlos. Por eso los tres primeros días de la cura es cuando a menudo peor nos sentimos y aun podemos percibir la sensación de hambre. 
Paradójicamente, cuanto más se prolonga la cura, menos hambre se siente, y a partir del segundo o tercer día, normalmente ninguna. Una vez superada la fase inicial, se limpia y descongestiona el tracto digestivo, luego los otros órganos de eliminación, hígado y riñones, se regulariza la presión en los vasos sanguíneos y mejoran la circulación y las enfermedades catarrales (resfriado, sinusitis, gripe, bronquitis) y las alergias.  


Indicaciones y contraindicaciones
Está indicada en las enfermedades o alteraciones del aparato digestivo, aparato circulatorio, sistema endocrino, sistema nervioso, aparato osteo-articular, aparato respiratorio, enfermedades dermatológicas, ginecología,etc. Está contraindicada expresamente en personas con diabetes insulino-dependientes o estado depresivo avanzado, en mujeres embarazadas o en período de lactancia. 
También es de gran provecho para el cabello, la piel y cualquier tratamiento estético en general.  
Durante la cura aumenta la sensibilidad hacia nuestro entorno y de manera considerable las capacidades creativas e intuitivas. Muchas personas empiezan en estos días a abrirse y gozar de la música clásica, descubren de manera espontánea las bellezas de la naturaleza, del mar, o perciben por primera vez un estado interior de armonía, de paz consigo mismas y con el resto del universo, de autoconfianza y gozo de estar vivas. 
Por tanto conviene llevar a cabo la cura en una época en que uno no esté sobrecargado de trabajo ni de compromisos sociales. El estado anímico invita a la reflexión, a momentos de silencio, al encuentro con uno mismo, a actividades recreativas.  


Ingredientes del sirope 
El auténtico sirope de savia está compuesto por la savia de arce C+ de cultivo ecológico certificado procedente de Canadá, y de la savia de palma, obtenido de palmeras crecidas en plena selva tropical. La presencia de glucosa-alimento imprescindible para el cerebro y los músculos- proviene en un 100% de la propia savia.  


La preparación 
Por cada vaso grande (1/4 litro) de agua fría o tibia, al gusto de cada uno, se añaden: 
-2 cucharadas soperas de zumo de limón fresco (aprox. medio limón) 
-2 cucharadas soperas del auténtico sirope de savia 
-1 pizca de pimienta de cayena en polvo (pimentón picante - opcional) 
Se mezcla todo y listo para tomar.  


La realización 
La cura completa dura de siete a diez días, en los cuales sólo deben ingerirse el preparado de Sirope de Savia de palma y arce, zumo de limón, agua y optativamente una pizca de cayena, pero ningún otro alimento. Cada día se tomarán de ocho a diez vasos grandes del preparado, uno cada dos horas aproximadamente. Se completa con una infusión laxante suave antes de la primera toma al día y otra antes de acostarse. Mientras se esté haciendo la cura sólo se podrán tomar infusiones y abundante agua. Después de la cura hay que realizar una transición alimentaria correcta de dos o tres días con zumos de fruta, caldos vegetales etc. Posteriormente se debe continuar con unas bases sanas de nutrición. 

Extraído de la revista "Cocina Vegetariana".

2 comentarios:

  1. ME encantó la sencillez con la que explicaste. Fantástico articulo y ecomendable al 100%.
    ¿me podrias indicar si la receta de la página web es correcta o mejor me quedo con la tuya?
    http://www.ayuno.es/dietas-de-ayuno/otras-dietas/48-ayuno-de-sirope-de-savia-de-arce-y-limon

    Gracias!!!

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    1. Hola Marta Rosa, acabo de ver el enlace que me mandas y la verdad, la receta que se da en esta página es prácticamente igual, sólo varía en el pimentón. Creo que las dos son aptas para hacerla así que quédate con la que más te guste o mejor sabor tenga... El ayuno es algo muy recomendable tanto para depurar el organismo como si queremos sentirnos un poco menos hinchados o bajar algún kilito de más. Pero en general es una práctica que debería hacerse asiduamente, con ella ayudamos al cuerpo a darle un respiro y a que se recupere de tanta ingesta de comida. Suerte y ya nos comentarás. Un saludo.

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