Un ejemplo de almuerzo podría ser el siguiente:
1. Comenzar con un buen vaso de zumo de verduras o una ensalada de crudos. Así aportamos a nuestra dieta dos cosas importantes: la primera, que siempre antes de comer (también de desayunar y cenar) debemos tomar alimentos crudos. Esto facilita la digestión de todo lo que vayamos a comer posteriormente. Si no has tomado fruta en el desayuno también puedes empezar con una pieza de fruta o un zumo, pero mejor verduras y hortalizas, porque dependiendo de qué frutas, podrás tomarlas también como postre.
Si comenzamos nuestro almuerzo con un zumo de verduras o ensalada verde, estamos cubriendo gran parte de minerales, fibra, y grasas ( en caso de que tomes una ensalada y la aliñes con aceite de oliva virgen), así como también proteínas, si el zumo lo completamos con una cucharada de alga espirulina que nos aporta también hierro, calcio, fibra,... además de que también nos está aportando ácidos grasos esenciales y por otro lado, es saciante, por lo que si tienes problemas de sobrepeso te ayudará a comer menos cantidad de comida. No olvides que si el zumo o la ensalada la enriqueces con semilla (pipas de calabaza, girasol, linaza, bayas de gogi,...), estás aportando muchos más minerales y ácidos esenciales a tu dieta. También puedes completar la ensalada con algo de frutos secos, como nueces o dátiles, que también completarán tu dieta.
2. A continuación podrás empezar con los platos calientes: si eres de buen comer, puedes seguir con una crema de verduras o un potaje o una sopa. Si has empezado con un zumo de verduras, no es necesario tomar crema de verduras o potaje, pues tiene mayor alimento el tomar las verduras crudas, que no pierden sus propiedades, a tomarlas cocidas. Por tanto, si te apetece tomar un plato caliente, puedes tomar una sopa de vegetales con quinoa y algas (como wakame, nori...). La quinoa también nos aporta todos los aminoácidos necesarios que el cuerpo no puede sintetizar para formar la proteína, aparte de ser una fuente de minerales importante, tal que el fósforo, calcio, magnesio (tan importante para el buen mantenimiento del cabello, uñas,músculos,...). El alga wakame nos aporta muchísimo calcio aparte de fibra, hierro, oligoelementos...
3. Seguidamente vamos a tomar el plato principal. Aquí entra ya la imaginación de cada uno, pues hay numerosas combinaciones de alimentos ricos y completos. Lo único que has de tener en cuenta es lo que dijimos al comienzo: cubrir todas nuestras necesidades diarias de nutrientes.
Un ejemplo de segundo plato puede ser cualquiera de los que tenemos en nuestra sección de recetas veganas y vegetarianas. Si eres vegetariano, puedes introducir en el plato queso (procura que sea lo más sano y ecológico posible,esto es, que el cuajo utilizado sea vegetal), huevos ( por favor, siempre de la categoría 0), ... Si eres vegano, lo único que te faltaría por completar es la dosis de vitamina B12, que no puede fabricar nuestro cuerpo (pues el resto del complejo B ya lo completamos con la dosis de verduras, sobre todo crudas que hemos tomado en el zumo, así como las semillas y frutos secos). Por tanto, lo único que puedes hacer es tomar un suplemento o alimentos enriquecidos como la levadura de cerveza enriquecida con B12 en varias tomas al día para cubrir nuestras necesidades de 2 ó 3 mcgr. diarios. No olvides tampoco poner a cualquier plato que hagas una parte de algas, ya sea wakame, o nori o espagueti de mar, que te estará aportando más proteínas, hierro, calcio y fibra, además de que va a dar un sabor especial a tus platos.Y si optas por un plato con legumbres, cocinándolas con un trozo de alga kombu evitarás las molestas flatulencias.
4. Por último, y para los más golosos, llega la hora del postre. Puedes tomar una pieza de fruta como puede ser: papaya o piña que es digestiva con lo que ayudarás a tu estómago a hacer la digestión más fácilmente.
Si no puedes pasar sin algo dulce (aunque tenemos que decir que el azúcar hace que no asimiles bien todos los nutrientes que has comido), toma algo endulzado con estevia, sirope de ágave, miel de palma o caña, que en el caso de los dos primeros poseen un índice glucémico muy bajo con lo cual viene muy bien para las personas que tienen diabetes (incluso la estevia tomada en infusión ayuda a bajar los niveles de azúcar en sangre). No utilices el azúcar blanca o refinada. No te aporta nada y descalcifica los huesos.
También en nuestro apartado de recetas tienes algunos postres fáciles de hacer y muy sanos. Si no tienes tiempo, toma un yogur de soja, o unas natillas de arroz o avena,... de las que ya vienen preparadas.
Sería interesante que se acostumbraran a tomar una infusión después de las comidas, ya que ayuda a hacer la digestión y según qué tisanas, nos aportan unos beneficios u otros. Por ejemplo, una infusión de cola de caballo o diente de león es diurética, el té verde y el jengibre son digestivas,...
En fin, esto es un ejemplo de lo que siempre debemos tener en cuenta a la hora de preparar nuestros menús: que todos los nutrientes básicos estén cubiertos. Esperamos haberles servido de ayuda, sobre todo a aquellos que empiezan en esta alimentación. Sólo me queda animarlos para que sigan haciéndolo, pues es una forma de mantenernos sanos y evitar muchas enfermedades derivadas del consumo excesivo de carne que hoy en día estamos viendo, y cómo no, los animales también se lo agradecerán. Un saludo a todos!!!!
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