lunes, 9 de julio de 2012

Propiedades del Amaranto

Vitalidad, magia, potencia, alegría, resistencia... con estos adjetivos podríamos definir al amaranto, el grano sagrado, un grano milenario lleno de tantas virtudes y propiedades que lo han hecho protagonista en la historia y en el desarrollo de las grandes culturas precolombinas. 
Existen indicios de su cultivo desde hace 7000 años por el pueblo maya en todas las zonas de extensión de su imperio. Posteriormente fueron los aztecas y los incas quienes siguieron cultivándolo y valorando de tal manera sus beneficios, que llegaron a considerarlo un alimento sagrado. 
Es un planta muy resistente, no sólo a las inclemencias climáticas sino también a las plagas y a las condiciones más desfavorables de cultivo.Su especial metabolismo puede realizar su fotosíntesis a altas temperaturas y con muy poca agua, lo que la hace muy adaptable a cualquier tipo de terreno, incluso los muy pequeños o poco fértiles.  




Su nombre deriva del griego amaranthus y significa "inmortal e inmarchitable"; ha sido considerada desde siempre una planta sagrada, medicinal y un alimento altamente nutritivo. 
Diversas investigaciones han avalado la eficacia del amaranto cuando se utiliza como recurso alimentario para la recuperación nutricional de niños desnutridos. 
Su valor nutritivo es excepcional y hacen de este grano uno de los mejores alimentos en el presente y para el futuro según la Organización Mundial de la Salud (OMS). 


Qué contiene su grano  


-Proteínas de alto valor biológico ya que posee todos los aminoácidos que el organismo no puede producir y sobre todo un elevado contenido en lisina que no está presente en los cereales. 
-Alto contenido en calcio, magnesio, hierro y fósforo, que ayudan a prevenir la osteoporosis, anemia y a regular los niveles de azúcar en sangre. 
-Ácidos grasos insaturados, precursores del colesterol "bueno" que ayudan a prevenir la arterioesclerosis. Destaca la presencia de escualeno, un ácido graso que antes se obtenía de ballenas o tiburones y que es muy apreciado por sus beneficios cosméticos como rejuvenecedor de la piel. 
-No contiene gluten, lo que lo hace apto para celíacos o intolerantes al trigo.  






Cómo cocinar el amaranto


Necesitamos 3 partes de agua por una de amaranto, dejar que alcance el punto de hervor, bajar el fuego y cocer tapado unos 40 minutos aproximadamente. Lo podemos utilizar en sopas, panes, repostería y estofados. En tiendas de dietética se encuentra en grano, copos, harinas y bebida. 


Artículo publicado en la revista "Cocina Vegetariana" . 

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